Divagaciones . . .

Hoy es uno de esos días que te levantas antes de que salga el sol para salir a montar un rato y te preguntas ¿Por qué? Empiezas a pensar en la cama, lo agustito que se esta a estas horas fresquito, con los ojos cerrados.... la miras ... vuelves a mirarlas y aun no sabes como y porque tu cuerpo escapa de la habitación camino a la cocina para desayunar.

Te vas quitando las legañas mientras untas las tostadas y remueves el café. Se te sigue viniendo a la mente la cama.... el sueño.... pero como un autómata acabas de desayunar y cuando te das cuenta estas disfrazado listo para salir a montar. pisas la calle ... las 7:30 de la mañana... primeros rayos de sol...y ni un alma por la calle.... pero montas en la bici (no sabes como has logrado pasar el pie de un lado a otro) y te pones a dar pedales en dirección al punto de encuentro pensando, a ver si con un poco de suerte no va nadie y me doy la vuelta a la cama.... pero no es así y allí están ya esperándote..... ¡ Que se te han pegado las sábanas ! .... ¡Quítate las legañas! ...te gritan.... y ya empiezas a despertar.

Y te empiezas a olvidar tal cual suben las pulsaciones, empiezas a entrar en calor y las piernas empiezan a moverse de manera rápida. por las venas empieza a correr un gusanillo, un virus que poco a poco va infectando tu cuerpo y te empuja más y más a pedalear. Vas rodando con tu colegas, hablando cuando se puede, intentando respirar otras veces. Pasa uno, pasa otro, no des tirones, eso es un hachazo no un relevo, tengo las patitas al oporto.... las típicas muletillas ciclistas se van repitiendo, junto con algún chiste 'ingenioso' para romper el grupo jeje. Llegar a cada repecho con el corazón 2 pasos por delante de ti, con el agradable sabor a sangre en la garganta y la vista nublada, has llegado antes porque e soltado, iba mirando pulsaciones, estoy cansado de ayer.....

Paradita a mitad de ruta con su café, tosta o simplemente plátano o barrita energética mientras se comentan las jugadas de lo que llevamos de mañana, del día anterior o se recuerdan anécdotas y vuelta a casa, ya mas tranquilamente, continuando con la charla.

Llegas a casa cansado, flojeándote las piernas, sudado y quemado por el sol, con ganas de quitarte la ropa y meterte en la ducha.... miras la cama.... vuelves atrás 5 horas .... te vuelves a preguntar el ¿Por qué? .... pero repasas la mañana.... y ya tienes el por qué .....